Por Ana María Ibáñez
Economista, profesora de la Facultad de Economía y directora del Centro de Estudios sobre Desarrollo Económico (CEDE) de la Universidad de los Andes, Colombia
La evolución de la pobreza rural en Colombia parece tener una relación estrecha con la dinámica del conflicto colombiano. Al comparar el mapa de pobreza para Colombia en 1993, antes de iniciarse la intensificación del conflicto, y en 2005, se observan coincidencias en muchos casos entre los municipios con un incremento de la pobreza y con una intensificación del conflicto.
¿Es la profundización de la pobreza en las áreas rurales colombianas el resultado del conflicto interno? Afirmar que existe esta causalidad sin un examen juicioso no es riguroso. Probable también es que los grupos armados ilegales hayan surgido y consolidado su hegemonía en las áreas rurales pobres y aisladas del país con debilidades institucionales históricas que poco contribuyeron a generar procesos de desarrollo exitosos e incluyentes.
La literatura sobre las causas y las consecuencias del conflicto aborda los dos temas y ha encontrado evidencia para las dos causalidades: la pobreza causa conflicto y el conflicto causa pobreza. El caso de Colombia parece no ser la excepción. El surgimiento de los grupos armados se inició en áreas rurales pobres y aisladas y, con los ingresos del narcotráfico, se expandió por otras regiones del país. Los impactos del conflicto, a su vez, profundizaron la pobreza y deterioraron aun más el tejido social e institucional en estas regiones, generando así un círculo vicioso del cual todavía no salimos en algunos municipios del país.
La Facultad de Economía de la Universidad de los Andes de Colombia, con el apoyo del programa Dinámicas Territoriales Rurales de Rimisp, examinará esta doble relación entre conflicto y pobreza y esperamos contribuir en un debate que está lejos de ser concluyente.
Fotografía: Scott Wallace / World Bank
El blog de la Red Prensa Rural 
Varios países de América Latina padecen dinámicas de poco crecimiento económico y mucha exclusión social, como Colombia. Pero no en todos se han instalado procesos de violencia tan desgarradores. No me cabe duda de que hay una retroalimentación entre ambos fenómenos, pero creo que se complementan con coaliciones sociales y políticas cuya confrontación tiene cierta independencia de las condiciones del país.
By: Julio Berdegué on 13 junio 2009
at 7:49 pm